La Copa conquista Asturias
/
El profesor de Educación Física del Colegio de los Dominicos de La Felguera dijo a sus alumnos que iban Oviedo a ver una obra de teatro. A las puertas del Auditorio Príncipe Felipe de la capital asturiana se desveló la verdad y la sorpresa no pudo ser más interesante para los pequeños. No había ningún actor esperando a los estudiantes. En su lugar, un trofeo de 36,8 cm y más de seis kilos de peso que, allá por principios de julio, hizo soñar a todo un país. Los chavales de los Dominicos fueron los primeros que, ayer, pudieron tocar y fotografíar la Copa del Mundo que acredita a España como flamante campeona de fútbol. Después vinieron muchos más.
“Los chavales están emocionados, no sabían a lo que venían pero están encantados”, explicó Ana Celia Menéndez, profesora del colegio felguerino que añadió que “para todos nosotros es un orgullo haber ganado esta copa y mucho más tenerla aquí y poder tocarla. Es un trofeo querido y deseado que ha costado mucho esfuerzo conseguir”.
La alegría de esta profesora era buen ejemplo de lo que sentían los niños. “Nos encanta haber venido es impresionante”, señalaron Alejandro Blanco, Mario Vaz, Pelayo Sandino y Mario Álvarez. Estos cuatro chavales langreanos sólo echaron en falta que “pudiera estar aquí cerca algún futbolista como Iniesta, Xavi o Casillas”. “¿Y a Villa? ¿No queréis ver a Villa?”, les preguntan, a lo que sin duda responden “es que en Langreo a Villa le vemos bastante, porque es de allí”. Todos estos pequeños estudiantes de Segundo de Primaria recuerdan dónde estaban y qué hacían el día que España ganó el Mundial. “Yo con mis padres en un bar, estabamos histéricos”, señala uno a lo que otro compañero añade “yo lo mi en cada de mis abuelos, porque estaba de vacaciones, nos tiramos al río de noche para celebrarlo”.
“Los chavales están emocionados, no sabían a lo que venían pero están encantados”, explicó Ana Celia Menéndez, profesora del colegio felguerino que añadió que “para todos nosotros es un orgullo haber ganado esta copa y mucho más tenerla aquí y poder tocarla. Es un trofeo querido y deseado que ha costado mucho esfuerzo conseguir”.
La alegría de esta profesora era buen ejemplo de lo que sentían los niños. “Nos encanta haber venido es impresionante”, señalaron Alejandro Blanco, Mario Vaz, Pelayo Sandino y Mario Álvarez. Estos cuatro chavales langreanos sólo echaron en falta que “pudiera estar aquí cerca algún futbolista como Iniesta, Xavi o Casillas”. “¿Y a Villa? ¿No queréis ver a Villa?”, les preguntan, a lo que sin duda responden “es que en Langreo a Villa le vemos bastante, porque es de allí”. Todos estos pequeños estudiantes de Segundo de Primaria recuerdan dónde estaban y qué hacían el día que España ganó el Mundial. “Yo con mis padres en un bar, estabamos histéricos”, señala uno a lo que otro compañero añade “yo lo mi en cada de mis abuelos, porque estaba de vacaciones, nos tiramos al río de noche para celebrarlo”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario